La Secretaría de Salud de México ha emitido una alerta sanitaria tras confirmar cuatro casos importados de sarampión, una enfermedad altamente contagiosa causada por un virus de la familia Paramixoviridae. Hasta el momento, se han notificado un total de 859 casos probables entre sospechosos y sujetos a análisis.
El primer caso fue identificado en un niño de un año y ocho meses en marzo del presente año, seguido de contagios a dos adultos y otro bebé. Estos casos han sido vinculados a procedencias europeas, aumentando la preocupación de posibles brotes.
La transmisión del sarampión ocurre a través de las gotitas expulsadas por tos o estornudos de personas infectadas, afectando principalmente a quienes no están vacunados o no han padecido la enfermedad. El virus puede transmitirse desde cuatro días antes hasta cuatro días después de la aparición de ronchitas en la piel.
Para mitigar la propagación y evitar hospitalizaciones, se recomienda el aislamiento domiciliario de los afectados. La enfermedad se manifiesta con fiebre alta, manchas rojizas en la piel, irritación ocular, rinitis, y tos. En algunos casos, pueden aparecer manchas pequeñas con centro blanco en la mucosa bucal.
En respuesta a estos casos importados, el Comité Nacional para la Vigilancia Epidemiológica (Conave) ha instado a todas las unidades médicas del país a mantenerse alerta y el Centro Nacional para la Salud de la Infancia y la Adolescencia (Censia) ha reforzado la importancia de completar los esquemas de vacunación contra el sarampión. El esquema nacional incluye dos dosis de la vacuna, administradas a los 12 y 18 meses, con una dosis adicional a los seis años para niños nacidos antes de 2022.